El niño
despertó con las primeras luces del día. Apenas despejó su mente, corrió a ver
que habían dejado en sus zapatitos. No había
nada. Decepcionado, volvió a la cama.
Afortunadamente, los otros niños del orfanato seguían durmiendo.
Inédito
Foto recuperada desde Internet
http://www.bancodeimagenesgratis.com/2012/01/los-3-reyes-magos-melchor-gaspar-y.html